miércoles, 28 de julio de 2010

CAPÍTULO 4 - CONFIANZA ROTA..



- Será mejor que te acerque un poco a la pared, pareces no tener fuerzas ni para sostener tu propia cabeza. - Dijo arrastrando la silla
- Muchas gracias, Jessi. Lo necesitaba, estoy tan cansado..
- Ahora te dejaré descansar un rato mientras hacen efecto las pastillas. - Dijo mientras se dirigía a la puerta.
- No, por favor, Jessi. No me dejes solo.
- Beberé mas Whisky si quieres, lo que sea, pero no te vayas por favor.
- No me dejes solo, Jessi, por favor.
- Hablemos un momento.. Escúchame, por favor.
- Tienes muy mala cara.. Será mejor que te ayude a estar mas cómodo. Y te cambie de lugar.
- No entiendo a que te refieres. ¿Que quieres decir?. ¿A dónde me quieres llevar?.
- Te voy a soltar un momento, para ponerte más cómodo.
- Mas te vale no intentar nada, o tendrás mucho que lamentar. - Dijo mientras le soltaba los tobillos.
No pronto le hubo soltado las muñecas reunió las escasas fuerzas de que disponía y echó a correr hacia la puerta principal.
« Pero.. ¿No me sigue..? ¿Acaso piensa dejarme escapar?. Tengo que intentarlo.. Esta maldita puerta debe de abrirse.. Maldita sea, está cerrada con llave.. ¿Que hago ahora?.. La ventana, claro, seguro que puedo abrirla e irme.. «
La ventana bloqueada con un candado, abrió a la primera tan solo una rendija, justo para que comprobase que no podría sacar ni siquiera una mano fuera.
« Mierda.. no hay forma de salir de esta puñetera cabaña. Con razón no me perseguía.. Sabe que no me iré a ninguna parte.. «
Se dejó caer al suelo abatido y lloró
La vio acercarse con un bulto sospechoso en su chaqueta y tembló aterrado.
- Jessica, por favor, actúe sin pensar. - Dijo mientras levantaba los brazos asustado.
- No lo hagas, por favor. Haré lo que quieras, pero.. no me dispares, por favor.
- Camina y cállate. - Dijo furiosa, mientras acariciaba su revolver y se lo mostraba.
- Baja el arma, por favor.
- Entra y desvístete. - Dijo mientras le mostraba la puerta del baño.
- Pero.. ¿Para que quieres que me desvista?. - Dijo entre lloros.
Ella le quitó el seguro a la pistola sin decirle palabra
- Ya lo hago, pero por favor, guarda eso. Podría dispararse, por favor, Jessi. - Dijo mientras se desvestía tan rápido como sus manos se lo permitían.
- Y ahora siéntate en la silla.
- ¿La dejo donde está?. - Dijo mientras miraba perplejo la silla colocada dentro de la bañera.
- Siéntateeeeeeee - Chilló cabreada
El se sentó y apoyó sus manos sobre el estómago con cuidado de no hacer movimientos bruscos.
- Levanta las manos. - Dijo con voz enérgica.
- Las levanto, pero no me vuelvas a atar, por favor, Jessi.
- No claro que no.. - Dijo mientras cerraba las esposas en su muñecas, esposándole a la barra de la ducha.
- Hoy no te hará falta regular la altura del teléfono de ducha, me da la impresión de que no lo necesitarás para nada.
El se echó a llorar asustado sin saber que contestarle.
- Ponme de nuevo las vendas en las muñecas, por favor, Jessi.
- Quítame las esposas, por favor.
- Ahora vuelvo, trata de no moverte esta vez.
- No haré nada, te lo prometo.
« ¿De que serviría que me moviese?. No tengo ningún sitio donde ir. Aunque pudiese romper la barra, no lograría salir de aquí antes de que me disparase. No hay nada que pueda hacer, salvo esperar que sea una muerte lo mas rápida posible.. «
« Pero.. si tenía tanto empeño en grabar como dejaba de respirar tranquilamente en la cama.. « Eso quiere decir, que.. Oh, cielos. Pretende matarme de forma violenta, sino no tiene el menor sentido que me grabase así. «
« Me las va a hacer pasar putas, de otra forma no me hubiese esposado. Las esposas solo pueden significar eso.. Tengo miedo.. Suceda lo que suceda. No tengo forma de impedírselo.. Estoy por completo en sus manos..«
Al rato volvió
Se le acercó con un palo largo y una cuerda.
El la miró aterrado.
- ¿Para que es eso?. ¿Que vas a hacerme?. Contéstame, por favor.
- De verás, Jessi. No haré nada. Perdóname por favor. Yo.. yo.. - Titubeó asustado.
- Siento mucho haberte molestado, Jessi.
- Por favor, no puedes culparme por tratar de escapar, ¿verdad?. Cualquiera lo hubiese intentado. Yo.. yo.. - Dijo ya al borde de las lágrimas.
- Silencio - Gritó enfadada
- He intentado tratarte con cortesia e incluso con amabilidad, y me has decepcionado dos veces, ya no lo harás una tercera. - Dijo mientras le miraba con frialdad.
- Perdóname, por favor, no sabía lo que hacia. Jessi, por favor, creéme.
- Hubiera preferido que no me dieses problemas y estuvieses ya dormido. - Dijo mientras le ataba un largo palo desde la cadera hasta casi llegar al tobillo.
- ¿Para que es eso?. ¿Que estás haciendo?. ¿No valdría con que me atases a la silla?. - Dijo aterrado
- Jessica, por favor.. Díme que estas haciendo, por favor, díme algo. - Dijo sollozando
Sus piernas ya entablilladas reposaban sobre el borde de la bañera. La cuerda estaba demasiado apretada y parecía a punto de cortarle la circulación. Sus pies reposaban en el aire sobre el borde de la bañera.
- Me.. me estás asustando mucho.. Díme algo, lo que sea- Háblame por favor. . Dijo entre sollozos
Ella mientras tanto, ató sus muslos a la silla con un cinturón y abandonó la habitación sin molestarse siquiera en responderle.
- Jessicaaa - Chilló asustado
« Ostias ostias.. No se me ocurre ningúna buena razón para que me entablille ambas piernas, en lugar de simplemente atarlas.. Además si estoy esposado. ¿Que necesidad tenía de atarme así las piernas?. No entiendo nada. Todo esto no era necesario.. ¿Que coño podría hacer?. Joder.. joder como aprietan las jodidas cuerdas. «
« Dios.. dios, por favor. Que esté equivocado y solo pretenda asustarme.. Tiene que ser eso.. pero.. nunca la había visto tan furiosa..«
Al rato volvió y se sentó en el borde de la bañera, y cogió su pierna derecha y la colocó de forma que quedase sujeta entre las suyas.
- Jessica, por favor, sea lo que sea que estés pensando en hacer, no lo hagas. Por lo que mas quieras. No lo hagas. - Suplicó aterrado.
- Esto te va a doler un poco.. Lo siento por ti. - Dijo mientras le miraba con frialdad.
- ¿ Que.. que vas ha hacerme?. No me hagas daño, por favor. No lo hagas. - Dijo aterrado
- Si te estás quieto será solo un momento. - Dijo mientras cogía un martillo del suelo
- Noooooooooooo, no lo hagas. - Chilló histérico.
Ella cogió el martillo con ambas manos y lo descargó con fuerza contra su tobillo, dandole un fuerte golpe.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh - Aulló el de dolor antes de desmayarse.
- Jessica por favor, para. Sueltame, por favor..
- No me hagas mas daño, por favor. Por lo que mas quieras detente - Dijo aterrado al verla coger de nuevo el martillo.
- Lo siento, calculé mal el golpe y no está roto. - Dijo mientras cogía de nuevo el martillo.
- Nooooooooooooooooo - Chilló mientras daba un fuerte tirón a las esposas tratando de soltarse sin conseguirlo.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh - Chilló mientras le daba otro martillazo.
Cuando volvió en si, ella estaba apretando su tobillo y moviéndolo para comprobar si estaba roto.
- No te preocupes lo ataré a la silla para que te duela un poco menos, así de paso me aseguro de que no intentes soltarlo. - Dijo mientras se lo entablillaba a la silla.
- Oh, si, atalo por favor. Lo que sea con tal de que no me duela tanto, muchas gracias. - Replicó asustado
- Sueltame la otra pierna, Jessica por favor.
- No me hagas esa salvajada de nuevo. Por dios, Jessica, por dios.. - Dijo llorando
Ella se sentó y cogió su otra pierna, entre las suyas fuertemente sujeta.
- No lo hagas.. Nooooooooooooo, por favor.. Noooooooooooo. - Chilló aterrado.
- Nooooooooooooooooooo - Chilló completamente histérico
- Un momento y habré terminado, no te preocupes esta vez te lo daré mucho mas fuerte, así lo romperé al primer golpe. - Dijo mientras cogía el martillo con ambas manos.
- Noooooooooooooooooo - Chilló con todas sus fuerzas.
Por toda respuesta, Jessica dio un golpe seco, en su tobillo.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh - Gritó de dolor, desmayandose de nuevo.
Cuando volvió en sí, se retorcia de dolor y estaba muy pálido.
- Jessica, por favor, olvida lo que te dije. Pegame un tiro, por favor.
- Por favor, matame. Lo que sea antes de seguir aguantando este dolor. Matame, por favor..
- Si lo vas ha hacer de todas formas, cuanto primero lo hagas, será mejor, por favor.
- Olvida mis suplicas, de antes. No sabía lo que decia, disparame por favor..
- Ahhhhhhhhhhhh, para por favor, para. - Dijo mientras le movía el tobillo en todas direcciones, comprobando que estuviese roto.
- En un rato estarás mejor, ya lo verás. - Dijo mientras le vendaba el tobillo cuidadosamente retorcido, y lo unía a la pata de la silla.
- Muchas gracias, Jessi, así me duele un poco menos. - Dijo entre sollozos.
- Jessica por favor.. ¿Podrías darme alguna pastilla?. Haré lo que quieras, dormiré o estaré despierto, pero por favor, dame algo para calmar un poco el dolor..
- Aunque sea Whisky, dame algo, por favor.
- Por favor, por lo que mas quieras, dame algo,
- Jessi, por favor. Te lo suplico, dame algo, lo necesito.
De pronto sonó el teléfono
- Esperarás un momento, puede ser una llamada importante. - Dijo mientras se iba y cerraba la puerta a sus espaldas.
- No tardes, por favor, Jessi. - Dijo sollozando.
« Ostia puta, que dolor.. Y yo me quejaba del estómago, esto es mil veces peor. No entiendo nada.. ¿Porque ha tenido que hacerme esta salvajada?. Debo de tener los dos pies rotos.. Y puede que una pierna.. No lo entiendo.. ¿Porque?. ¿Porque ha tenido que hacerme esto?. «
« Joder.. ¿Porque?. Tan solo intenté huir, ni tan siquiera la toque. No le di ni un triste empujón al tratar de huir. No entiendo nada. Lo único que hice fue ir hasta la entrada.. «
« Mierda.. en mala hora se me ocurrió tratar de escapar, si antes tenía pocas posibilidades. Ahora son totalmente nulas. Nada de lo que haga logrará sacarme de aquí.. Mierda.. «
« No podría ni llegar hasta la cama sin su ayuda.. Jamás saldré de aquí con vida.. Y ella. ¿Acaso se ha vuelto completamente loca?. Si, lo está.. Nadie en su sano juicio haría esta salvajada. Está loca.. O peor aún, es una psicópata.. Mierda, ahora desearía haber muerto el primer día que intentó envenenarme.. «
« No tengo ningúna oportunidad de escapar.. Podría aparcar frente a la cabaña, dejar la puerta abierta y las llaves puestas, y aunque llegase al coche, no podría hacer nada.. Eso contando con que lograse salir de esta habitación, la sola idea de mover un pie..»
« No pienso moverme, ya me duele horrores así, y no seré yo quién aumente mi dolor. No.. De eso ya se encargó ella y francamente bien.. Quisiera saber porque se ha vuelto tan violenta de repente. Por cabreada que esté, esto no tiene el menor sentido..»
« Ufff, si ha hecho esta salvajada. Eso significa que está dispuesta a hacer cualquier cosa y que llegará al final. «
« Solo me queda rendirme ante la evidencia, de que jamás me dejará salir de aquí con vida. No. Me guste o no. Aquí acabará todo, lo único que veré antes de morir será esta jodida cabaña.. «
El sonido de la puerta al abrise le sacó de su ensimismamiento.
- Jessi, por favor, dime que me darás algo. - Suplicó mientras contraía su cara en una gran mueca de dolor.
- Lo que sea, pero dame algo que me haga dormir y dejar de sentir este dolor, por favor, Jessi.
- No. Lo siento, pero no te daré nada más.
- ¿Pero, porque?. ¿Que te he hecho yo para que me odies tanto?.
- Por lo que mas quieras, dame algo. Me duele mucho. De verás, casi no aguanto el dolor.
- Te lo suplico, dame algo, lo necesito. - Dijo llorando.
- Te alegrará saber que las apuestas han vuelto ha subir..
- ¿Las apuestas?. - Replicó incrédulo.
- Es lo único que te importa, las puñeteras apuestas. - Dijo con amargura.
- Un momento.. ¿Como es que han subido?. ¿Que ha pasado?. - Replicó preocupado
- Casi se han duplicado.. Y siguen subiendo. - Dijo orgullosa
- No entiendo nada.. Pero dame algo para el dolor, por favor.
- Ahora pon tu mejor sonrisa y procura parecer todo lo relajado que puedas. - Dijo mientras encendía la cámara.
- Pero.. ¿Es que acaso te has vuelto loca?. - Dijo mirandola aterrado
- ¿ Para que quieres grabarme?. ¿Porque otro video?. ¿No son ya suficientes?.
- Silencio.. Tranquilo, y sonrie todo lo que puedas. - Dijo mientras empezaba a grabarle
- Si hago lo que me dices.. ¿Me prometes que después me darás algo que me calme el dolor?.
- Claro, te daré justo lo que necesitas. - Dijo con irónia.
- Jessi, por favor, me estás asustando otra vez.
- Shussss

sábado, 24 de julio de 2010

CAPÍTULO 3 - LA GRABACIÓN..





- Pon tu mejor cara y callate, no se trata tan solo de una apuesta.. Es algo mucho mas importante..
- ¿De que se trata?. Dimelo, por favor. Sea lo que sea, me gustaría saberlo, por favor.
- ¿Tan terrible es que no te atreves a contarmelo?. - Dijo asustado
- Lo sabrás en su momento. Será toda una sorpresa para ti.
- Me estás asustando..
- Hace rato que pasaron los diez minutos.. ¿No se supone que tenías muchas cosas que decirme?.
- Sueltame un rato, por favor. Aunque solo sea una mano.
- Esperarás, ya no falta mucho. Ten un poco de paciencia.
- ¿Que no falta mucho para qué?.
- Para empezar, o bueno en tu caso para ir terminando..
- ¿Ir terminando?. - Titubeó asustado
- Sé que hoy no fallarás, lo veo en tus ojos.
- Nunca había visto una mirada tan fría como la tuya. ¿Que te he hecho para que me odies tanto?.
- No te odio, son las circunstancias. Reconozco que no actuaste correctamente en el pasado, ni de lejos, y tu lo sabes.
- Lo sé, creeme, por favor. Haría lo que fuese por poder cambiar lo que hice.
- Pero si a querer darte una buena lección, se une una cuantiosa apuesta..
- ¿Como de cuantiosa?. ¿De cuanto dinero estamos hablando?.
- Te aseguro que la duplicaré, y jamás diré a nadie nada de todo esto.
- ¿Y contra quién apostaste?.
- La primera apuesta, contra un amigo común, que no te diré..
- ¿Quieres decir que alguien que conocemos.. - Dijo mientras se le quebraba la voz
- ¿Quién puede odiarme tanto?. - Dijo preocupado
- No, no te preocupes. Ella no te odia. Ni siquiera sabía que se trataba de ti, hasta que vió el video.
- ¿Ella?. ¿De quién se trata?. Dimelo por favor.
- ¿El video?. ¿Has grabado mas de un video?.
- Un momento.. Has dicho la primera apuesta. ¿Has apostado con alguien más?.
- Por favor, dime que has apostado.
- Estás muy nervioso. Necesitas un poco mas de Whisky para tranquilizarte.
- Por favor, no me des mas. Dejame intentar aclarar un poco las cosas, por favor.
- Bebe. - Dijo acercadole el vaso a los labios.
El la miró asustado, y mantuvo la boca cerrada.
- No, por favor. No quiero beber más.
- Vamos, no me hagas perder el tiempo. - Dijo mientras le obligaba a terminarse el vaso entre toses.
- Me encuentro fatal. ¿Podrías darme un poco de agua?. Por favor.
- Tiene gracia, primero no querías beber y ahora me pides agua..
- Solo un poco de agua, por favor.
- Creo que ha llegado el momento, ya estás listo.
- ¿Listo para que?. ¿Que me vas a hacer?.
Por toda respuesta abandonó la habitación.
- ¿Dónde vas?. Contestame, por favor.
- Jessicaaaaaa, por favor. Vuelve aquí. - Chilló asustado
- Cierra los ojos y estate muy quieto.. Necesito un vídeo. - Dijo entrando en la habitación
- ¿Quieres decir que haga como si ya estuviese muerto, verdad?.
- Si, justamente eso.. Necesito que parezca una muerte dulce..
- Lo haré, pero dame agua, por favor. Tengo muchísima sed, por favor.
- schusss
El hizo lo que le pedía, y al terminar no pudo evitar que le entrase una risa nerviosa.
- Jejeje, al final me matarás dos veces.. Si no fuese por lo mal que me encuentro, hasta tendría gracia..
- Ganarás la apuesta, seguro.
- Ahora podrías dejarme irme, con ese vídeo ya ganas la apuesta. Es lo único que te importa, ¿verdad?.
- Me temo que aunque lo hiciese muy lejos no llegarías.
- Vamos, es la hora. - Dijo mientras soltaba las vendas de sus tobillos de la cama, dejandoselas puestas.
- Gracias por soltarme, supongo que no habrás cambiado de idea dejandome irme, ¿verdad?.
- Me temo que no cambiaré de idea.
- ¿Puedo sentarme aunque sea solo un momento, por favor?. - Dijo cuando le hubo soltado las muñecas.
- Claro, sientate un momento.
- Gracias. - Dijo mientras con una mano sostenía su estómago y con la otra trataba de mantener el equilibrio y de no caer sobre la cama.
- Venga, no te entretengas. - Dijo mientras le ayudaba a ponerse en pie.
- ¿A donde me llevas?. - Dijo asustado
- Entra - Dijo mientras le mostraba una puerta abierta
- ¿El baño?. Muchas gracias, la verdad es que hace rato que lo necesitaba.
¿Podrías dejarme solo un par de minutos?. Por favor
- Usalo, no te preocupes, no veré nada que no haya visto ya.
- Muchas gracias, siento ser tan pesado. - Dijo mientras se desabrochaba los pantalones, apoyandose en la cisterna para no perder el equilibrio.
- ¿Es esto normal?. - Dijo aterrado al ver que su orina tenía un perfecto tono rosado
- ¿Se puede saber que me has dado?. Con razón me encuentro tan mal.
Tuvo que cogerse con ambas manos a la cisterna para no caerse.
- Necesitas sentarte. - Dijo mientras le ayudaba a sentarse en una silla dispuesta en mitad del cuarto de baño.
- Abre bien las piernas.
El la miró unos segundos sin comprender lo que le decia.
- Pero.. ¿Para que?. - Dijo mientras abría las piernas asustado
- Vamos.. no te preocupes, estoy terminando.. - Dijo mientras le ataba los tobillos con las vendas a ambas patas de la silla.
- Claro.. como no.. Lo único que pretendías es que no te estropease la preciosa habitación, ¿verdad?
- Ahora que ya sabes que no me iré muy lejos de aquí. ¿Puedes dejarme al menos las manos libres?. Por favor.
- En cuanto haya terminado te soltaré. - Dijo mientras le ataba ambas muñecas a la espalda uniendo ambas vendas.
- Cuando haya muerto, me dará igual tener las manos libres. - Dijo mientras las lágrimas anegaban sus ojos.
- ¿Que crees que haré?. Estoy demasiado mareado como para intentar siquiera ponerme en pie.
- Y aunque lo intentase.. Tampoco podría, apenas tengo fuerzas para nada..
- Estás algo nervioso.. Será mejor que bebas algo. -Dijo mientras se daba la vuelta y abandonaba la habitación
- ¿No me irás a dar mas Whisky, verdad?.
- ¿Dónde vas?. No me dejes solo, por favor.
El se echó a llorar, a lo lejos la oía hacer ruido, mientras se ponía aun mas nervioso de lo que estaba.
Cuando entró en la habitación, el levantó la cabeza y la miró asustado.
- ¿Tienes sed, verdad?. - Dijo mientras le mostraba un vaso de agua.
- Oh, si, por favor. Dejame beber un poco de agua. - Suplicó nervioso.
- Claro, te daré agua. - Dijo mientras le mostraba sendas pastillas.
- Me las tomo, estoy demasiado débil como para intentar oponerme. - Dijo mirandola asustado.
- ¿Para que son?. - Titubeó preocupado.
- Te ayudaran a que estés menos nervioso y probablemente te duermas.
- Pero..
- Pero.. ¿Para que quieres que me duerma?.
- Será lo mejor para ti.
- Pero.. Tengo aún tantas cosas que decirte. Quisiera poder hablar un poco contigo.
- La verdad es que no entiendo nada.. Dime al menos porque..
- Por buena que sea la apuesta. ¿Te parece razón suficiente como para que cometas un asesinato?.
- Yo no haré nada.. Tu has venido hasta aquí voluntariamente, estuvimos tomando unas copas, te entró sueño y te quedaste dormido.
- De pronto cuando fui a verte, noté que no respondías y llamé a urgencias, pero ya era demasiado tarde.
- Nada pudieron hacer por ti. Olvidaste que no debías mezclar alcohol con medicamentos y te dió un ataque al corazón o siemplemente dejaste de respirar de pronto..
- Yo no he tenido nada que ver.
- Claro, como iba a ser culpa tuya.. - Dijo con sarcasmo
- Te olvidas de un detalle.. ¿Que pasa con todos los tweets que me enviaste ayer?. ¿Crees que nadie los verá?.
- Por supuesto que no. Solo hemos cruzado un par de DM”s y ya están borrados todos, tanto los que te envié, como tus respuestas. Y claro los que tu enviaste no existen..
- Y claro, como son dm's es como si nunca hubiesen existido.. Has pensado en todo..
- Alguien puede haberme visto subir a tu coche, y hablará..
- ¿Y que tendría de raro que dos viejos amigos queden para tomar algo?.
- Nada, claro. Te has asegurado y lo has planeado todo al detalle, ¿verdad?.
- No me interrumpas..
- Según lo saludable que parezcas luego, incluso puede que vinieses a mi encuentro borracho y te quedases dormido camino de la cabaña, no es extraño la gente que se pierde en un bosque y más si es en plena noche.
- El frío de la noche te adormeció y te congelaste, no despertaste a tiempo de poder salvar tu vida.
- Ni siquiera se te ocurrió llamarme para pedir ayuda, simplemente te dormiste y falleciste.
- Pero.. Esto no se piensa y se hace en cinco minutos.. debes de llevar días enteros planeando cada detalle o quizás semanas.
- ¿Tanto me odias?.
- No, no te odio.. Hubo un tiempo en que si, pero esos días ya se acabaron.
- Entonces no entiendo nada. Si no me odias, sino que simplemente no quieres saber nada de mi. ¿Porque constestaste a mis llamadas?.
- ¿Porque volviste a hablar conmigo y a darme esperanzas?. Si sabías que jamás podríamos volver a intentarlo.
- No lo entiendo..
- Y luego está otro detalle.. ¿Con que clase de gente te relacionas que ve normal apostar la vida de alguien como quién se juega una cena?.
- ¿Te parece normal?. Te has parado a pensar por un momento en que si te pagan la apuesta estarás para siempre en sus manos. Podrán chantajearte el resto de tu vida con esto. ¿Estás dispuesta a pagar tan alto precio?. - Dijo pensativo
- No te preocupes tengo muy buenos amigos, que me ayudarán en lo que necesite.
- Ya lo creo que tienes muy buenos amigos. Uno de ellos está sentado frente a ti.
- Oh, no sabes lo que hubiese dado por escuchar esas palabras de tus labios.
- Lo hubiese dado todo. Pero ahora, no son más que palabras vacias.
- La última esperanza de un moribundo.
- El último cartucho de polvora que lanzas con la esperanza de salvarte, pero..
- La polvora se mojó hace meses. Ya no hay nada que puedas hacer, salvo esperar el desenlace.
- Llamame imbecil, pero sigo enamorado de ti. Jamás haría nada que te perjudicase.
- No sabes lo arrepentido que estoy de lo sucedido.
- Jessi, por favor. Creeme, te juro que te estoy diciendo la verdad.
- ¿Que ganaría con mentirte?. Te quise, te quiero y siempre te querré.
- Sueltame un ratito y dejame demostrarte que he cambiado. No te arrepentirás, por favor, Jessi. - Suplicó preocupado.
- ¿Porque habría de soltarte?.
- ¿Que crees que iba a hacer?. Se me están cerrando los ojos, apenas si puedo mantener la mirada.
- Por favor, me encuentro fatal, sueltame aunque sea una mano.
- Eso ya lo habíamos hablado, te soltaré después.
- Perdona que te lo diga, pero.. ¿Como puedes ser tan cruel conmigo?.
- No te estoy pidiendo nada extraordinario, tan solo poder mover una mano. Solo eso, por favor, Jessi.
De pronto sonó su móvil rompiendo el tenso silencio.
Ella se apresuró a contestar y salió de la habitación dejandole a solas con sus pensamientos.
El mientras tanto intentaba en vano forcejear y tratar de liberarse.
« No se para que lo intento.. Hace horas que trato de soltarme y las puñeteras vendas no han cedido ni siquiera unos centímetros. No entiendo nada. He intentado razonar con ella, y nada de lo que le he dicho le ha servido para nada. Haga lo que haga, seguirá adelante, y yo no puedo hacer absolutamente nada. «
« De nuevo estoy fatal, ha debido de darme un buen coctel de medicamentos. Estoy muchísimo peor que ayer. Hoy no cabe error posible. Me estoy abrasando por dentro, mi pobre estómago. Cielos, me duele horrores. Eso sin contar con el mareo que tengo, mis pobres ojos apenas si enfocan lo que tengo delante. Eso por no hablar del sueño que tengo.
Si no fuese porque estoy sentado hace rato que me habría dormido. «
« Pensandolo bien, quizás no sería mala idea que me rindiese y procurase dormir. El dolor de estómago se iría. Y yo me encontraría mejor. «
« Tonterías si me durmiese ya lo creo que me encontraría mejor. Jamás me volvería a doler el estómago, porque en el momento en que me duerma, me relajaré y probablemente será lo último que haré. Maldita sea, no quiero dejar este Mundo así, de una forma tan absurda, y sobre todo tan pronto. Tengo tantas cosas por hacer, tanto que decir. Tantas personas a las que debería de ver, con las que debería de hablar. «
« Ella, era una de ellas. Si hubiese hablado con ella cuando sucedió probablemente lo hubiese entendido y puede que hasta me hubiese disculpado. Pero cuando quise darme cuenta de mi error, fui demasiado cobarde para reconocerlo. Fui un estúpido, ahora me doy perfecta cuenta de ello, justo cuando no puedo hacer nada para remediarlo..»
Ella le miró desde el quicio de la puerta, estaba tecleando y sonreía.
- Jessi, por favor. Sueltame aunque solo sean un par de minutos. No te molestaré, por favor.
- Espera un rato, ahora mismo estoy ocupada. ¿Es que no lo ves?.
- Perdona, no pretendía molestarte. Dime que al menos te lo pensarás, por favor, Jessi.
- Una de dos, o estás medio histérico o estas pastillas son una porquería, ya deberías estar medio dormido, y estás prácticamente igual que cuando llegué. Eso no puede ser..
- Me temo que las menciones deberán esperar. Lo primero es lo primero, quiero acabar con esto cuanto antes. - Dijo saliendo de la habitación.
- Jessica por favor, me callaré. Vuelve, por favor.
- Jessi - Chilló asustado
Al rato la vio aparecer con la botella de Whisky del día anterior, de nuevo llena, y supo lo que le esperaba.
- Jessica, por favor. No me des mas de beber.
- Por lo que mas quieras, dejame descansar un rato.
- Dormiré o haré lo que quieras, pero no me des más de beber. - Suplicó al borde de las lágrimas.
- Si, dormirás y pronto. Ya deberías estar dormido. Mierda de pastillas.. Me van a oír..
- Tendré que ayudarte a que te duermas mas deprisa.
- Traga - Dijo mientras le daba dos pastillas con un poco de agua
- Jessica, por favor no me obligues a tomarme más - Dijo asustado al verla coger otras dos pastillas.
- No te preocupes, de momento con cuatro será suficiente.
- Ahora procura estar tranquilo y duermete. - Dijo mientras revisaba las vendas de sus tobillos
- No solo no piensas soltarme, sino que además te aseguras de que no pueda hacer el menor movimiento.
- Sencillamente genial. - Dijo con sarcasmo
- Por dios, Jessi. ¿Que crees que iba ha hacer?. ¿Mover un pie y avisar a los Geos o que?.
- Aunque moviese las piernas no podría hacer nada. Ni aunque tuviese el móvil al alcance de mis pies.
- ¿Podrías darme un poco de agua?. Por favor, Jessi.
- Solo un poco de agua, por favor.
- Porque beber agua, si hay Whisky.. - Dijo mientras llenaba un vaso
- No, por favor. Ya no quiero beber. - Dijo palideciendo
- Sería muy descortés por mi parte si ni siquiera te ofrezco algo de beber. Eres mi invitado.
- Curiosa forma de decirlo. Si salgo de esta prometeme que jamás seré tu invitado. - Dijo con sarcasmo.
- Bebe y rápido. - Dijo mientras le acercaba el vaso a los labios y le obligaba a terminarselo.
- ¿Porque?. Solo dime, porque. - Dijo llorando
- Calmate, no quedrás que todos te vean llorar, ¿verdad?.
- ¿Todos?. ¿Quienes me verán?. ¿De que estás hablando?.
- De momento te verán los que apostaron, pero ya sabes como son estás cosas..
- En breve las imágenes recorrerán twitter, y a partir de ahí circularán por toda la red sin cortapisas.
- Pero.. No puedes estar hablando en serio.
- ¿Es que ni siquiera me vas permitir morir dignamente y en la intimidad?.
- ¿Acaso vas a convertir mi muerte en un espectáculo?.
- Dime que al menos difuminarás mi cara, por favor, Jessi.
- Esas imágenes destrozarían a mi familia.
- Claro que las editaré, les pondré un precioso fondo. Nadie debe saber nunca donde fueron grabadas.
- Pero.. pero..
- ¿Solo te preocupa la cabaña?.
- No puedes estar hablando en serio.
- Dime que al menos lo pensarás, por favor, Jessi.
- Claro que si, lo pensaré. - Dijo con irónia.