viernes, 1 de junio de 2012

CAPÍTULO 67 - VALIOSO REGALO..







Claro. Lo mejor.
Pero.. ¿Lo mejor para quién?..
Cálmate Dennis..
Ella volverá. Sabes que volverá. 
Tan solo está un poco enfadada.
Quizás cansada. 
Si, es cierto. Ha trabajado mucho. 
Debe de estar agotada.
Y yo. Como soy un imbécil. 
En lugar de intentar ayudarla. ¿Que es lo que he hecho?. Reprocharle su comportamiento. E incluso, exigirle explicaciones..
Definitivamente. Tiene mucha paciencia. 
Cualquier otra persona me hubiese mandado al carajo y no se hubiese molestado siquiera en despedirse de mi.
Oh, Jessi. 
Ojalá solo hayas salido a tomar el aire y vuelvas pronto.
Tienes que volver..
A estas alturas no se que haría si tu no estás..
Mierda.. 
Soy gilipollas..
¿Porqué he tenido que cabrearte?.
Lo último que se me apetece hacer ahora es encargarme de todo.
Y sin embargo. Si yo no lo hago nadie mas lo hará.
En fin. Será mejor que vaya a ver como se encuentra. 
A fin de cuentas, lo peor que puede suceder es que lo encuentre muerto. Y en ese caso no tendría nada de lo que preocuparme.
Un rato después.
Dennis abrió la puerta del sótano. 
Bajó las escaleras y giró la llave, la puerta se abrió con un crujido.
Unos sollozos apagados sonaron en la penumbra de la habitación.
Dennis encendió todas las luces y miró por todas partes para ver de donde procedía la fuente del sonido. Sin el menor resultado.
De pronto abrió la puerta del pequeño trastero anexo y encontró el ataúd completamente cerrado.
Joder, tiene bemoles la cosa.
Creía que cuanto menos le habría permitido abandonar el ataúd y una cierta libertad de movimientos.
Pero se ve que no..
Dennis abrió la tapa del ataúd y se le quedó mirando como hipnotizado.
Joder.. Es increíble. Jamás pensé que Jessica tuviera los huevos de tratarle así.
Con razón me aseguro que no tendría el menor problema con el.
Como para darme problemas. Imposible. 
Ahora entiendo que dijeses que no se opondría.
No te joroba. Como para oponerse..
¿Quién podría oponerse sin poder realizar el menor movimiento?.
- Jessi. Jessi. Jessi. Gracias. Muchísimas gracias por dejar que entre un poco de aire en el ataúd. Te lo agradezco muchísimo. - Musitó entre sollozos mientras intentaba parpadear para acostumbrarse a la luz cegadora que iluminaba la estancia.
- Por favor. Por favor. Por favor. Jessi. ¿Puedes darme un sorbo de agua?. Por favor. Solo un poco de agua. - Suplicó preocupado mientras la buscaba con la mirada, aun parpadeando.
De pronto le vió y chilló aterrado.
- Ahhhhhhhhhhhhhh. - Chilló asustado sin poder dar crédito a lo que veía.
- Jessica. Jessica. Jessica. Ven, por favor. Ven. - Suplicó una y otra vez sin dejar de chillar histérico.
- ¿Quién?. ¿Quién es?. ¿Quién es usted y que hace aquí?. - Preguntó preocupado.
- Jessica. Jessica. Jessica.. - Chilló ya casi sin aliento mientras le miraba aterrado e incapaz de reaccionar.
Dennis le miró y golpeó varias veces la espuma de poliuretano que cubría su cuerpo, cada vez con mas energía.
Esto no va a ceder haga lo que haga, es imposible que logre liberarse por su cuenta.
Hay que ver lo bien que me conoces, Jessi.
Estoy seguro de que preparaste cada detalle minuciosamente pensando solo en lo que me gustaría encontrar.
Sabías que si le veía tan frágil e indefenso no podría resistirme a jugar.
¿Quién podría desperdiciar un regalo que le han preparado con tanta ilusión, con tanto cariño?..
No me lo puedo creer. 
No hay nadie que me conozca mejor que tu.
Sabías que verle así era lo único que podría hacerme reaccionar.
Que no resistiría la tentación de jugar un rato..
La emoción se apodera de mí..
Por primera vez desde hace varios días estoy ilusionado y con ganas de divertirme..
Oh, Jessi.. Jessi.. - Suspiró Dennis.
Dennis cortó un trozo de cinta de embalar y le amordazó cuidadosamente como si temiese estropear un regalo demasiado valioso.
Doug le miró aterrado, e intentó con todas sus fuerzas moverse.
- Mmmmmmmm. - Gimoteó aterrado mientras las primeras lágrimas rodaban por sus mejillas.
Oh, Jessi.. Jessi.. - Suspiró Dennis.
Es un regalo tan delicioso. Tan perfecto..
Dennis cogió una gasa y seco sus ojos cuidadosamente como si temiese hacerle daño.
Después los cubrió con una gasa seca y pegó un trozo de cinta de embalaje sobre ella.
- Mmmmmmmmmmm. - Chilló Doug aterrado mientras veía como se rompía su único vínculo con el exterior.
- Mmmmmmmmmmm. - Chilló de nuevo aun mas asustado.
De pronto escuchó cerrarse la tapa del ataúd.
Luego escuchó sus pasos alejándose y lloró desconsolodamente.
Jessi.. Jessi.. Jessi..
No puedes haberte ido y dejarme solo.
No. No puede ser. Tienes que volver.
Me da igual si no me sacas de aquí..
Me da igual si me vuelves a meter en la sucia leñera..
Me da igual si me quieres sumergir un rato en la bañera..
Lo que quieras hacer estará bien. 
Solo tienes que volver..
Maldita sea. No puedes haberte ido y dejarme con el..
Mierda.. 
Ni siquiera se quién es el.
Pero no hace falta ser demasiado inteligente como para saber lo que pretenderá hacer conmigo.
Seguro que es otro de los apostantes..
A saber cuanto le has cobrado por poder abusar de mi..
No lo quiero ni pensar..
Solo de pensar en lo que yo sería capaz de hacer con alguien tan indefenso, como lo estoy yo ahora, se me revuelve el estómago..
El problema es que ahora no seré yo quién disfrute..
Ahora soy un triste muñequito llorón en manos de..
Mierda.. 
¿En manos de quién?.
Mierda.. 
A saber lo que ha comprado..
No quiero ni pensar en lo que querrá hacer conmigo.
A estas alturas hubiese preferido que me hubiese dado un buen bofetón y me hiciese callar.
Al menos así sabría a lo que debo atenerme..
Ni siquiera me habló..
Maldita sea mi suerte. 
Ni siquiera se molestó apenas ni en tocarme ni en hablarme..
Joder..
Eso es lo peor..
No saber que es lo que pretenderá hacer conmigo.
Si por lo menos me lo hubieses explicado..
¿Tan difícil era decirme que me habías?..
Mierda.. 
Ni siquiera se lo que has hecho conmigo.

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