miércoles, 17 de noviembre de 2010

CAPÍTULO 14 - ILUSIONES ROTAS..



- Perdóname, Jessi, no insistiré mas. Será como tu quieras.
- Pero, por favor. ¿Podrías decirme como piensas hacerlo?.
- ¿Como será el final?. - Dijo en un hilo de voz mientras la miraba cabizbajo
- Lo sabrás en su momento, no quisiera estropearte la despedida.
- Cuanto menos sepas, mejor será para ti.
- Si no fuera porque ya no los tengo.. te diría que me has puesto los huevos de corbata.
- Esa frase suena a que.. - Dijo mientras palidecía
- Suena a que será muy violento. ¿Me equivoco?.
- ¿Y acaso existe algún asesinato que no lo sea?.
- Cierto, pero.. ¿Será algo mucho mas fuerte de lo que me has hecho hasta ahora?.
- Me gustaría tratar de estar preparado.
- Soy un imbécil, pero me sigue importando. No quisiera decepcionarte.
- Seguro que no lo harás. No hay mucho que puedas hacer para molestarme.
- Tienes razón, Jessi. Espero no darte excesivo trabajo.
- Bueno, yo ya tengo hambre.. Voy a preparar tu cena de despedida, nos vendrá bien tomar fuerzas para seguir.
- Muchas gracias, Jessi, seguro que será una cena deliciosa.
- Ahora vendrá Doug a hacerte un poco de compañía.
- Estoy segura de que os divertiréis un buen rato. - Dijo riéndose
- Claro, Jessi, me divertiré, si tu quieres. - Dijo con lágrimas en los ojos
- No tanto como yo, pero lo harás. No me cabe ninguna duda.
« ¿Cómo puede ser tan cruel conmigo?. Si tan solo le pedí unas horas de descanso. ¿Era acaso tanto pedir?. Si tan solo me dejase descansar una hora.. Estoy tan cansado, y dolorido.. A veces pienso que si me hubiese atropellado un autobús no estaría tan destrozado como lo estoy ahora. Se que es inevitable.. que nada de lo que pudiese hacer logrará salvarme, pero.. Estoy acojonado.. Mierda.. Ni siquiera eso puedo estar.. Me los ha cortado a puro huevo.. Mierda, no dejo de repetirlo.. Mis pobres testículos.. Me los cortó sin miramientos, como el que rebana la mantequilla antes de extenderla.. Maldita sea.. Ya ni sé lo que pienso.. ¿Tendría algún valor seguir viviendo así?. Si por lo que sea no llega hasta el final, me quedarán unas secuelas incalculables.. Que digo incalculables.. Aunque sobreviviese jamás volvería a ser el mismo que una vez fui. Siempre habría alguna cicatriz, algún órgano dañado, o quizás inservible que me recordaría una y otra vez lo que sucedió..»
« Y si sobreviviese.. ¿Que iba ha decir?. ¿Como podría explicar lo sucedido?. Nadie lo entendería a menos que lo contase todo.. Y no, mis labios están sellados, jamás contaré nada. Para ello tendría que implicarla. Tendría que demostrar que de verás sucedió así. ¿Y que pruebas tendría?. Salvo que apareciesen las famosas grabaciones, sería mi palabra contra la de ellos.. Nada tiene el menor sentido..»
« Mierda.. Ya oigo pasos.. Ahí viene esa mala bestia, seguro. Joder.. Desearía que mi corazón se parase.. Lo que sea antes de tener que soportar a ese animal. Se que me hará menos daño que ella, pero.. Cuando ella me tortura, aún tiene su razón de ser.. No entiendo que lo haga, pero, sé porque lo hace.. Cuando lo hace el, es violencia gratuita, sin el menor sentido, y sin la menor medida.. Ya ni sé lo que quiero.. «
Doug abrió la puerta, le miró y le dijó:
- Vas a divertirte como nunca lo hayas hecho, te voy a hacer un hombre. - Dijo guiñándole un ojo.
«Diosss, maldita sea mi suerte. No puede estar hablando en serio.. Ni siquiera eso va a respetar.. Dios.. dios.. Que esté bromeando..»
- Será mejor que te suelte.. - Dijo mientras soltaba sus piernas..
De pronto, levantó la vista dispuesto a posar el mechero sobre sus huevos, cuando de pronto, le dieron arcadas y devolvió en el cubo de nieve..
- Joder.. Está visto que no bromeaba cuando me dijo que no mirase la grabación.. Lo que debe de doler eso.. Solo de pensarlo..
- No te muevas, volveré ahora mismo.. Después de ver esto me hace falta un buen trago..
- Aunque bueno, no podrías moverte mucho aunque quisieses.. Pensandolo mejor, muevete mientras puedas y tengas algo que mover.
- Muchas gracias, y no se preocupe, no haré nada.
« ¿Y que coño podría hacer?. Si tan solo me soltó las piernas.. Por mucho que lo intente, sigo esposado, y aún peor no tengo fuerzas para nada. Aunque me hubiese soltado nada podría hacer.. Le dan arcadas al ver que me ha castrado, y pretendía violarme.. Eso si que no lo entiendo. ¿Que le puede importar lo que me suceda?. Si de todas formas va a torturarme sin miramientos.. ¿Que le preocupa?. Creo que en el fondo lo que le sucede es que se acaba de dar cuenta de que soy una persona, como el, con sentimientos, con pensamientos, y que estoy vivo. Hasta ahora creo que para el era lo mismo que si fuese un muñeco hinchable con el que divertirse y dejar abandonado luego en un rincón hasta la próxima vez que le apeteciese jugar. Sin duda que eso debo de ser para el.. Pero fue ver mis testículos y se quedó sin habla. Quién sabe.. Igual después de ver esto cambia de idea, y decide no torturarme..»
Jessica estaba cocinando, cuando de pronto vio pasar a Doug con paso apresurado hacia el baño.
Cuando salió aun tenía la cara desencajada.
- ¿Se puede saber que te pasa?. No me dirás que se te ha ido la mano, ¿Verdad?. Porque como te lo hayas cargado saldrás de esta cabaña con los pies por delante..
- De veras que no, Jessica. No le he tocado ni un pelo. Iba a divertirme un poco con el, cuando de pronto vi lo que le has hecho y se me revolvió el estómago..
- ¿Podría beber una copa, por favor?.
- Claro que si, sírvete lo que quieras. Ahí está el mueble-bar. - Dijo señalándolo.
Doug se sirvió un Whisky y la miró pensativo..
- Un momento.. ¿Has dicho que saldré con los pies por delante?. Pero..
- Pero.. ¿A que viene eso?.
- ¿No se supone que lo has traído aquí para matarle?.
- Si, justo para eso le he traído. ¿Y que?.
- Entonces.. ¿Que importancia tendría si yo le matase?.
- ¿Acaso no sería lo mismo?.
- Permíteme que me sirva otro trago de Whisky.. Pero es que me has dejado tieso..
- Me amenazas de muerte y te quedas tan tranquila. Lo dices como el que dice que se va a tomar algo.
- Llevas casi 24 horas torturándole y te escandalizas por la posibilidad de que se hubiese muerto entre mis manos. Cuando tal y como está, lo raro es que aún siga vivo..
- No lo entiendo.. No entiendo nada, y aun menos te entiendo a ti.
- Bueno, no te preocupes, son cosas que se dicen sin pensar.. Por supuesto que bromeaba.
- Tu por si acaso, procura que no se te vaya la mano.. No te mataría, ni por asomo, yo no soy una asesina.
- Soy una persona normal y corriente, muy tranquila y calmada. Jamás haría algo sin haberlo meditado largamente, y mucho menos si hay una vida en juego.
- No tienes de que preocuparte, me enfadé un poco, pero ya se me pasó.
- Claro que puedes beber Whisky, bebe cuanto quieras. Y perdona, tengo un pronto muy fuerte, pero ya sabes que no lo decia en serio.
- Claro, Jessi, normal que te hubieses enfadado.
- Ya está claro. Tanto tiempo preparandolo todo y que llegase yo y lo estropease en el último minuto, cualquiera se enfadaría y con razón.
- Bueno, si ya está todo aclarado, yo voy a seguir con la cena.
- Tu ve y diviertete un rato, procura que no se te vaya la mano.
- No, claro que no, Jessi. Tendré cuidado con lo que hago, no te preocupes.
- Ah, otra cosa. Sobre la silla está posada su ropa. Cuando acabes de divertirte con el, vistele y que esté presentable para la cena.
- Claro, Jessi, eso haré.
- Y no olvides no golpearle en la cara, tiene que parecer lo mas saludable posible.
- No se muy bien lo que te propones, pero eso haré.
- ¿A que hora debe estar listo para la cena?.
- Ya te avisaré, pero como mucho a las 23 le quiero listo para cenar y sentado a la mesa.
- Descuida Jessi, apenas le tocaré y en cuanto me digas le traigo aquí. - Dijo bebiendo otro vaso de Whisky.
Doug entró en la habitación y le miró, ni se había movido de la postura en que le había dejado.
- ¿No tenías ganas de moverte?. Debes de llevar horas atado, te dejo un buen rato libre y ni te mueves. Debes de ser estúpido..
- Perdón, no sabía que debía moverme.
- Digame que debo hacer y lo haré. No le daré problemas, se lo aseguro.
- Eso espero.. Me gasto un dineral, vengo hasta el quinto pino, y luego esto..
- Tan solo faltaba que tu me dieses problemas. Sería ya lo último que podría sucederme.
- Será mejor que me ponga a ello, o se me hará tarde. - Dijo mientras le ponía una soga al cuello.
- Por favor, quiteme eso. Haré lo que sea, por favor. Por favor.. - Suplicó aterrado.
Doug sujetó el extremo de la soga con la mano, mientras le quitaba las esposas.
«Dios.. dios.. dios, este es el final.. Nunca pensé que terminaría así. Ni mucho menos que no fuese ella quién pusiese fin a mi vida.. Al menos no sufriré, un tirón y mi cuello se partirá.. Con lo bestía que es, dará un tirón y se acabará todo en segundos.. Viendolo bien quizás hasta sea una suerte.»
- ¿Le puedo pedir un favor?.
- ¿Que quieres?.
- ¿Podría avisar a Jessica?. Si no es mucho pedir, me gustaría que lo último que viese antes de morir fuese su cara. Por favor, tan solo eso. Por favor.. - Suplicó asustado
- Date la vuelta.
- Muy bien, y ahora ayudate de tus manos y pon medio cuerpo fuera de la cama, de forma que tu cabeza repose en el suelo.
- Lo hago, pero por favor. Digame que avisará a Jessica, por favor.
- Muevete, vamos. Que no tengo todo el día. No puedo perder el tiempo con tonterías.
- Digame que la avisará, por favor.. Por favor..
- Silencio.
El lloraba asustado, mientras veía como su vida pendía de un hilo.
- Muy bien, pon las manos a tu espalda.
« Claro, no podía ser de otro modo.. Dejaré este maldito mundo, esposado. Torturado por un animal, y ahogado entre mis propios vomitos.. Y sino.. ¿Para que me iba a poner en esta maldita postura?. No tiene ni que hacer el menor esfuerzo para extrangularme.. Le basta sentarse sobre mí y tirar un poco de la cuerda. La gravedad hará el resto. Y lo que mas me duele es su mentira.. Deseaba tanto poder despedirme de ella. Poder decirle lo que siento.. Lo de menos era la cena.. Pero no, ni tan siquiera tuvo el valor para decirmelo. Me engañó, me hizo creer que podría vivir unas horas de felicidad, para luego en el último segundo arrebatarmelas y romper la ilusión de que todo era posible.. Maldita sea, Jessi.. ¿Tan difícil era decirme la verdad?. Lo hubiese entendido.. Ahora en cambio me siento traicionado, dolido y muy decepcionado.. Justo premio a lo que hice, así debiste de sentirte tu.. Y bien que me la has devuelto. Aprovechaste el último segundo para hacer que me sintiese como una mierda.. Ni tan siquiera me dejaste morir tranquilo.. Mis últimos segundos de vida, y me siento fatal. ¿Porque has tenido que engañarme?. ¿Tan difícil era que fueses sincera conmigo?..»

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