CAPÍTULO 15 - AL AGUA PATOS..

- Que desconsiderado soy, si estás casi cayendo de la cama. Eso no puede ser.
- Será mejor que te coloque un poco mejor. - Dijo mientras le ataba la rodilla vendada al somier.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh - Chilló de dolor.
- Por favor, por lo que mas quiera. No me mueva mas.
- Se ve que sigues sin entender las cosas a la primera. - Dijo mientras cogía el mechero y le quemaba la planta del pie.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh - Chilló de dolor, mientras apretaba los puños furioso.
- He dicho silencio.. Espero no tener que repetírtelo.
- Ya casi estás listo. - Dijo mientras le ataba la otra pierna al somier.
- Ahora vuelvo, se me ha olvidado un pequeño detalle que necesitas. Trata de no moverte.
Doug salió cerrando la puerta a sus espaldas.
- Jessi, ¿Puedo llevarme la botella de Whisky?.
- Claro que si, bebe cuanto quieras.
- Muchas gracias, tanto jugar con el, me ha dado sed.
- ¿Para que quieres el cubo?. - Dijo al verle llevarse un cubo lleno de agua.
- Quiero refrescarle un poco, está algo acalorado.
- Claro, buena idea. Eso le despejará del todo.
- Sin duda que si, Jessi. - Dijo Doug abandonando la habitación
« Este es el fin.. No se que mas puede necesitar. Pero en cuanto vuelva será mi final. Maldita sea.. ¿Que mas puede necesitar?. Si estoy atado, esposado y hasta tengo una soga puesta al cuello.. ¿Acaso necesita mas facilidades?. Le basta un simple tirón y se habrá acabado todo. Oh, Jessi.. Quisiera tanto que estuvieses aquí. Me prometiste que tendría una despedida.. Joder.. me lo prometiste.. Y en lugar de eso.. Esta mala bestia acabará conmigo.. Cielos.. espero que lo haga de un solo tirón. Conociéndole es capaz de alargarlo minutos.. Sería angustioso ver como se empeña en ahorcarme lentamente.. Dios, no quiero ni pensarlo.. Sería terrible..»
« Mierda.. Aquí viene de nuevo. Si tan siquiera pudiera levantar la cabeza y ver que ha traído.. Pero no, ni siquiera puedo hacer eso..»
- Empecemos.. Tengo muchas ganas de divertirme contigo. - Dijo mientras soltaba una sonora carcajada.
- Será mejor que te levante un poco la cabeza, soy un desconsiderado por hacerte reposar la cabeza sobre el suelo. Con lo frío que debe de estar. - Dijo mientras le cogía de los pelos y le levantaba la cabeza en peso.
- Ahhhhhhhhh - Chilló asustado.
- Si que eres flojito, apenas si te he tocado y ya chillas.
-Toma aire. - Dijo mientras le daba apenas unas décimas de segundo y hundía su cabeza dentro del cubo derramando parte del agua.
«Mierda.. Por si no me bastase con la soga, aún le parece poco y ha traído un cubo lleno de agua.. Será para asegurarse de no fallar. Si con la soga no se rompe mi cuello, le bastará con dejarme un rato dentro del cubo. Y en esta postura haga lo que haga no podré sacar la cabeza del cubo. Será por facilidades..»
«Joder.. Ya no puedo más. Esa mala bestia no me dejó ni siquiera tomar una bocanada de aire. Siento mis pulmones como si fuesen a reventar.. No puedo más. Maldito animal. Sácame ya, joder.. No me queda aire..»
«No aguanto mas.. Quizás debería abrir la boca y facilitarle todavía mas las cosas. Dios.. Estoy tan mareado que ya ni se lo que hago.. Mierda..»
Doug le veía forcejear, mientras se reía y bebía una copa de Whisky.
Hasta que no le vió agitarse violentamente no sacó su cabeza del cubo.
- Cof cof.. cof.. cof... - Tosió aterrado cuando por fin le liberó del cubo.
- Me alegra de ver que te diviertes. Pero trata de moverte menos.
- Al agua patito.. Te hace falta refrescarte un poco mas. - Dijo riéndose mientras le metía de nuevo la cabeza en el cubo.
«Mierda.. Otra vez, no.. Ni siquiera dejé de jadear y ya estoy otra vez sin aire.»
«Pero.. ¿Que está haciendo?. Joder.. No le basta con sumergirme en el agua.. Le hace falta además aplastarme contra el fondo.. ¿Porqué?. Joder. ¿Porqué?. ¿Acaso creé que podría levantar la cabeza?. Mierda.. En la vida he tragado mas agua que ahora.. Joder.. Este es el final.. Se me empieza a nublar la vista.. No puedo más..»
Un rato después Doug le sacó del cubo, ni protestó cuando le tiró de los pelos..
Doug le empezó a dar ostías en la cara para tratar de espabilarle, pero no reaccionaba. Tenía la cara morada y parecía no respirar.
- Joder tío, no me hagas esto.. Me vas a buscar un lío..
- Tienes que despertar, joder.. - Dijo mientras le quemaba las nalgas con la llama del mechero.
- Mierda.. ¿Y ahora que cojones hago?.. Joder.. Joder..
- Ya sé.. - Dijo Doug mientras golpeaba violentamente su espalda y le obligaba a devolver toda el agua.
De pronto, empezó a coger un poco de color. Y lo primero que vio fue a Doug paseándose por la habitación como si fuese un animal enjaulado, totalmente fuera de si.
- Joder.. Joder.. ¿Que cojones hago yo ahora?. - Dijo Doug mientras paseaba preocupado a un lado y al otro de la habitación.
«¿Y a este que le pasa?. Parece mas asustado que yo. No lo entiendo..»
- Una vez mas.. Si no resulta tendré que avisarla.. Maldita sea.. - Dijo Doug mientras le pasaba la llama del mechero por la planta de sus pies.
- Ahhhhhhhhhhhhhh. - Chilló aterrado
- Joder.. Joder.. Joder.. Estás vivo.. No sabes lo que me alegro de oír tu voz. - Dijo Doug mientras resoplaba aliviado.
- Será mejor que te suelte. - Dijo Doug preocupado, mientras le quitaba la soga y respiraba aliviado.
- No chilles o volverás al cubo. - Dijo Doug sonriendo.
- No chillaré, haré lo que sea, pero.. No me vuelva a meter la cabeza en el cubo, por favor. - por favor.. por favor. - Suplicó aterrado
Doug soltó sus rodillas de la cama y le ayudó a tumbarse sobre sus muñecas esposadas.
- Muchas gracias por dejar que me tumbe un rato. Lo necesitaba..
- Será mejor que te vista o se me hará tarde.
- ¿Perdón?. ¿Puedo preguntar porque debo vestirme de pronto?.
- Puedes preguntar, pero ni tengo ni idea de para que, ni mucho menos pienso contestar a tus preguntas..
- El menor movimiento que hagas y será el último. ¿Ha quedado claro?. - Dijo mientras le mostraba el bisturí aún ensangrentado.
- No se preocupe, no haré nada. Guarde eso, por favor.
- Siéntate y no me hagas perder el tiempo. - Dijo mientras le soltaba las esposas y ponía su polo sobre la cama.
- Vamos. ¿A que esperas para ponértelo?. - Dijo mientras le daba una fuerte bofetada.
- Lo.. lo siento mucho. Intento vestirme lo mas rápido que puedo.. - Dijo mientras ahogaba un grito en su garganta e intentaba vestirse.
«No entiendo nada.. ¿Porqué tengo que vestirme?. ¿Y porque está tan preocupado?. Joder.. No se lo que pretende hacerme. Pero me ha asustado. No tiene el menor sentido. Me tortura sin parar, casi me mata, y ahora pretende que me vista como si no hubiese sucedido nada?. ¿Acaso esperamos a alguién mas y debo parecer un invitado mas?. ¿O quizás pretenden abandonar mi cuerpo a la intemperie y quieren que parezca indemne?. No lo entiendo..»
- La camisa también, y el jersey. Date prisa. - Dijo mientras le daba un puñetazo en el estómago.
- Ya lo hago, pero por favor, no me pegué mas. Perdoneme, por favor. Voy lo mas rápido que puedo. - Dijo mientras apretaba los dientes e intentaba no chillar de dolor.
- Muy bien, ahora tumbate boca abajo. - Dijo mientras le ayudaba a tumbarse en la cama.
- Será mejor que te ponga en una postura un poco mas relajada. - Dijo riéndose mientras le esposaba la muñeca derecha al cabecero de la cama, dejando su cabeza de nuevo suspendida en el aire.
- Vamos no me hagas perder el tiempo, estira el brazo. - Dijo mientras le golpeaba el brazo izquierdo.
- Por favor, no me moveré. No haré nada. ¿Podría esposarme las muñecas juntas?. - Suplicó
- Me duele mucho el brazo, por favor. Tan solo eso, por favor. - Suplicó asustado.
Por toda respuesta, le dio un fuerte tirón, le retorció el brazo y le esposó la muñeca izquierda al somier todo lo tirante que pudo.
- Ahora lo más fácil para ti.. Abre bien las piernas y relajate.. - Dijo mientras soltaba una carcajada.
- Te voy a hacer todo un hombrecito, ya lo verás. - Dijo riéndose, mientras le sacaba el grueso pepino del culo.
- No te lo mereces, pero te haré un favor.. - Dijo mientras metía el pepino en el cubo y lo volvía a sacar ya limpio.
- Dame las gracias por haberlo lavado, aún no se porque me tomo tantas molestias contigo. No te lo mereces, pero.. Soy muy compasivo. - Dijo riéndose.
- Muchas gracias, es usted muy amable por lavarlo.
- Eso está mejor.
- Abre bien la boca.
- Vamos, tiene que entrar mas.. - Dijo mientras empujaba el pepino hacia su garganta.
El lloraba de dolor y se revolvía, tenía la mandibula casi desencajada, cuando de pronto se detuvo.
- Mucho mejor, y ahora quietecito.. No quiero oír ni una mosca, ¿estamos?.
El asintió con la cabeza, mientras gruesas lágrimas rodaban por sus mejillas.
- Estoy terminando, pronto disfrutarás de una perfecta velada. - Dijo mientras soltaba una sonora carcajada y le ataba la rodilla vendada de nuevo al somier.
- Mmmmmmmmmmmm - Chilló de dolor
- Creo que no me has entendido. No quiero oír ni una mosca. - Dijo mientras le pasaba la llama del mechero por los muslos.
«Maldito animal.. Sino estuviese tan machacado, ibas a saber lo que es bueno. Joder.. Hasta en eso tengo mala suerte. Casi me ahoga y yo voy y me repongo.. Maldita sea mi suerte. Todo podía haber terminado hace unos minutos. No tendría que soportar mas dolor, ni aguantar al animal este..»
«Ni siquiera puedo quejarme. ¿Que pretende que haga?. ¿Que me quede inmovil y no proteste cuando me está torturando?. Maldito animal..»
- Doug - Dijo Jessica a través de la puerta cerrada.
- ¿Si?. ¿Que quieres Jessi?.
- Ve terminando, date prisa que no tenemos toda la noche. - Dijo Jessica
- Claro, Jessi, ahora mismo acabo. En un rato te lo llevo.
«Joder, hablan de mí como si no estuviese aquí. No solo va a matarme sino que encima le parece que tarda y le manda que se apresure. Ni tan siquiera entró a ver como me encontraba. Lo único que le importa es que termine cuanto antes y deshacerse de mí.»
Grandes lágrimas rodaron por sus mejillas y ni protestó cuando Doug le ato la otra rodilla al somier.

CAPÍTULO 14 - ILUSIONES ROTAS..

- Perdóname, Jessi, no insistiré mas. Será como tu quieras.
- Pero, por favor. ¿Podrías decirme como piensas hacerlo?.
- ¿Como será el final?. - Dijo en un hilo de voz mientras la miraba cabizbajo
- Lo sabrás en su momento, no quisiera estropearte la despedida.
- Cuanto menos sepas, mejor será para ti.
- Si no fuera porque ya no los tengo.. te diría que me has puesto los huevos de corbata.
- Esa frase suena a que.. - Dijo mientras palidecía
- Suena a que será muy violento. ¿Me equivoco?.
- ¿Y acaso existe algún asesinato que no lo sea?.
- Cierto, pero.. ¿Será algo mucho mas fuerte de lo que me has hecho hasta ahora?.
- Me gustaría tratar de estar preparado.
- Soy un imbécil, pero me sigue importando. No quisiera decepcionarte.
- Seguro que no lo harás. No hay mucho que puedas hacer para molestarme.
- Tienes razón, Jessi. Espero no darte excesivo trabajo.
- Bueno, yo ya tengo hambre.. Voy a preparar tu cena de despedida, nos vendrá bien tomar fuerzas para seguir.
- Muchas gracias, Jessi, seguro que será una cena deliciosa.
- Ahora vendrá Doug a hacerte un poco de compañía.
- Estoy segura de que os divertiréis un buen rato. - Dijo riéndose
- Claro, Jessi, me divertiré, si tu quieres. - Dijo con lágrimas en los ojos
- No tanto como yo, pero lo harás. No me cabe ninguna duda.
« ¿Cómo puede ser tan cruel conmigo?. Si tan solo le pedí unas horas de descanso. ¿Era acaso tanto pedir?. Si tan solo me dejase descansar una hora.. Estoy tan cansado, y dolorido.. A veces pienso que si me hubiese atropellado un autobús no estaría tan destrozado como lo estoy ahora. Se que es inevitable.. que nada de lo que pudiese hacer logrará salvarme, pero.. Estoy acojonado.. Mierda.. Ni siquiera eso puedo estar.. Me los ha cortado a puro huevo.. Mierda, no dejo de repetirlo.. Mis pobres testículos.. Me los cortó sin miramientos, como el que rebana la mantequilla antes de extenderla.. Maldita sea.. Ya ni sé lo que pienso.. ¿Tendría algún valor seguir viviendo así?. Si por lo que sea no llega hasta el final, me quedarán unas secuelas incalculables.. Que digo incalculables.. Aunque sobreviviese jamás volvería a ser el mismo que una vez fui. Siempre habría alguna cicatriz, algún órgano dañado, o quizás inservible que me recordaría una y otra vez lo que sucedió..»
« Y si sobreviviese.. ¿Que iba ha decir?. ¿Como podría explicar lo sucedido?. Nadie lo entendería a menos que lo contase todo.. Y no, mis labios están sellados, jamás contaré nada. Para ello tendría que implicarla. Tendría que demostrar que de verás sucedió así. ¿Y que pruebas tendría?. Salvo que apareciesen las famosas grabaciones, sería mi palabra contra la de ellos.. Nada tiene el menor sentido..»
« Mierda.. Ya oigo pasos.. Ahí viene esa mala bestia, seguro. Joder.. Desearía que mi corazón se parase.. Lo que sea antes de tener que soportar a ese animal. Se que me hará menos daño que ella, pero.. Cuando ella me tortura, aún tiene su razón de ser.. No entiendo que lo haga, pero, sé porque lo hace.. Cuando lo hace el, es violencia gratuita, sin el menor sentido, y sin la menor medida.. Ya ni sé lo que quiero.. «
Doug abrió la puerta, le miró y le dijó:
- Vas a divertirte como nunca lo hayas hecho, te voy a hacer un hombre. - Dijo guiñándole un ojo.
«Diosss, maldita sea mi suerte. No puede estar hablando en serio.. Ni siquiera eso va a respetar.. Dios.. dios.. Que esté bromeando..»
- Será mejor que te suelte.. - Dijo mientras soltaba sus piernas..
De pronto, levantó la vista dispuesto a posar el mechero sobre sus huevos, cuando de pronto, le dieron arcadas y devolvió en el cubo de nieve..
- Joder.. Está visto que no bromeaba cuando me dijo que no mirase la grabación.. Lo que debe de doler eso.. Solo de pensarlo..
- No te muevas, volveré ahora mismo.. Después de ver esto me hace falta un buen trago..
- Aunque bueno, no podrías moverte mucho aunque quisieses.. Pensandolo mejor, muevete mientras puedas y tengas algo que mover.
- Muchas gracias, y no se preocupe, no haré nada.
« ¿Y que coño podría hacer?. Si tan solo me soltó las piernas.. Por mucho que lo intente, sigo esposado, y aún peor no tengo fuerzas para nada. Aunque me hubiese soltado nada podría hacer.. Le dan arcadas al ver que me ha castrado, y pretendía violarme.. Eso si que no lo entiendo. ¿Que le puede importar lo que me suceda?. Si de todas formas va a torturarme sin miramientos.. ¿Que le preocupa?. Creo que en el fondo lo que le sucede es que se acaba de dar cuenta de que soy una persona, como el, con sentimientos, con pensamientos, y que estoy vivo. Hasta ahora creo que para el era lo mismo que si fuese un muñeco hinchable con el que divertirse y dejar abandonado luego en un rincón hasta la próxima vez que le apeteciese jugar. Sin duda que eso debo de ser para el.. Pero fue ver mis testículos y se quedó sin habla. Quién sabe.. Igual después de ver esto cambia de idea, y decide no torturarme..»
Jessica estaba cocinando, cuando de pronto vio pasar a Doug con paso apresurado hacia el baño.
Cuando salió aun tenía la cara desencajada.
- ¿Se puede saber que te pasa?. No me dirás que se te ha ido la mano, ¿Verdad?. Porque como te lo hayas cargado saldrás de esta cabaña con los pies por delante..
- De veras que no, Jessica. No le he tocado ni un pelo. Iba a divertirme un poco con el, cuando de pronto vi lo que le has hecho y se me revolvió el estómago..
- ¿Podría beber una copa, por favor?.
- Claro que si, sírvete lo que quieras. Ahí está el mueble-bar. - Dijo señalándolo.
Doug se sirvió un Whisky y la miró pensativo..
- Un momento.. ¿Has dicho que saldré con los pies por delante?. Pero..
- Pero.. ¿A que viene eso?.
- ¿No se supone que lo has traído aquí para matarle?.
- Si, justo para eso le he traído. ¿Y que?.
- Entonces.. ¿Que importancia tendría si yo le matase?.
- ¿Acaso no sería lo mismo?.
- Permíteme que me sirva otro trago de Whisky.. Pero es que me has dejado tieso..
- Me amenazas de muerte y te quedas tan tranquila. Lo dices como el que dice que se va a tomar algo.
- Llevas casi 24 horas torturándole y te escandalizas por la posibilidad de que se hubiese muerto entre mis manos. Cuando tal y como está, lo raro es que aún siga vivo..
- No lo entiendo.. No entiendo nada, y aun menos te entiendo a ti.
- Bueno, no te preocupes, son cosas que se dicen sin pensar.. Por supuesto que bromeaba.
- Tu por si acaso, procura que no se te vaya la mano.. No te mataría, ni por asomo, yo no soy una asesina.
- Soy una persona normal y corriente, muy tranquila y calmada. Jamás haría algo sin haberlo meditado largamente, y mucho menos si hay una vida en juego.
- No tienes de que preocuparte, me enfadé un poco, pero ya se me pasó.
- Claro que puedes beber Whisky, bebe cuanto quieras. Y perdona, tengo un pronto muy fuerte, pero ya sabes que no lo decia en serio.
- Claro, Jessi, normal que te hubieses enfadado.
- Ya está claro. Tanto tiempo preparandolo todo y que llegase yo y lo estropease en el último minuto, cualquiera se enfadaría y con razón.
- Bueno, si ya está todo aclarado, yo voy a seguir con la cena.
- Tu ve y diviertete un rato, procura que no se te vaya la mano.
- No, claro que no, Jessi. Tendré cuidado con lo que hago, no te preocupes.
- Ah, otra cosa. Sobre la silla está posada su ropa. Cuando acabes de divertirte con el, vistele y que esté presentable para la cena.
- Claro, Jessi, eso haré.
- Y no olvides no golpearle en la cara, tiene que parecer lo mas saludable posible.
- No se muy bien lo que te propones, pero eso haré.
- ¿A que hora debe estar listo para la cena?.
- Ya te avisaré, pero como mucho a las 23 le quiero listo para cenar y sentado a la mesa.
- Descuida Jessi, apenas le tocaré y en cuanto me digas le traigo aquí. - Dijo bebiendo otro vaso de Whisky.
Doug entró en la habitación y le miró, ni se había movido de la postura en que le había dejado.
- ¿No tenías ganas de moverte?. Debes de llevar horas atado, te dejo un buen rato libre y ni te mueves. Debes de ser estúpido..
- Perdón, no sabía que debía moverme.
- Digame que debo hacer y lo haré. No le daré problemas, se lo aseguro.
- Eso espero.. Me gasto un dineral, vengo hasta el quinto pino, y luego esto..
- Tan solo faltaba que tu me dieses problemas. Sería ya lo último que podría sucederme.
- Será mejor que me ponga a ello, o se me hará tarde. - Dijo mientras le ponía una soga al cuello.
- Por favor, quiteme eso. Haré lo que sea, por favor. Por favor.. - Suplicó aterrado.
Doug sujetó el extremo de la soga con la mano, mientras le quitaba las esposas.
«Dios.. dios.. dios, este es el final.. Nunca pensé que terminaría así. Ni mucho menos que no fuese ella quién pusiese fin a mi vida.. Al menos no sufriré, un tirón y mi cuello se partirá.. Con lo bestía que es, dará un tirón y se acabará todo en segundos.. Viendolo bien quizás hasta sea una suerte.»
- ¿Le puedo pedir un favor?.
- ¿Que quieres?.
- ¿Podría avisar a Jessica?. Si no es mucho pedir, me gustaría que lo último que viese antes de morir fuese su cara. Por favor, tan solo eso. Por favor.. - Suplicó asustado
- Date la vuelta.
- Muy bien, y ahora ayudate de tus manos y pon medio cuerpo fuera de la cama, de forma que tu cabeza repose en el suelo.
- Lo hago, pero por favor. Digame que avisará a Jessica, por favor.
- Muevete, vamos. Que no tengo todo el día. No puedo perder el tiempo con tonterías.
- Digame que la avisará, por favor.. Por favor..
- Silencio.
El lloraba asustado, mientras veía como su vida pendía de un hilo.
- Muy bien, pon las manos a tu espalda.
« Claro, no podía ser de otro modo.. Dejaré este maldito mundo, esposado. Torturado por un animal, y ahogado entre mis propios vomitos.. Y sino.. ¿Para que me iba a poner en esta maldita postura?. No tiene ni que hacer el menor esfuerzo para extrangularme.. Le basta sentarse sobre mí y tirar un poco de la cuerda. La gravedad hará el resto. Y lo que mas me duele es su mentira.. Deseaba tanto poder despedirme de ella. Poder decirle lo que siento.. Lo de menos era la cena.. Pero no, ni tan siquiera tuvo el valor para decirmelo. Me engañó, me hizo creer que podría vivir unas horas de felicidad, para luego en el último segundo arrebatarmelas y romper la ilusión de que todo era posible.. Maldita sea, Jessi.. ¿Tan difícil era decirme la verdad?. Lo hubiese entendido.. Ahora en cambio me siento traicionado, dolido y muy decepcionado.. Justo premio a lo que hice, así debiste de sentirte tu.. Y bien que me la has devuelto. Aprovechaste el último segundo para hacer que me sintiese como una mierda.. Ni tan siquiera me dejaste morir tranquilo.. Mis últimos segundos de vida, y me siento fatal. ¿Porque has tenido que engañarme?. ¿Tan difícil era que fueses sincera conmigo?..»

CAPÍTULO 13 - EL REGALO..

- Jessi, me estás asustando mucho.. ¿Que vas ha hacer con eso?.
- No tienes de que quejarte.. Aunque podría usar el hornillo si lo prefieres.
- Perdóname, Jessi, por favor. A veces no se lo que digo.
- Intenta relajarte y piensa en otra cosa, en un momento habré terminado.
- Lo intentaré, gracias. Perdona que sea tan pesado..
Mientras tanto ella le iba cubriendo poco a poco con la nieve, el temblaba de pies a cabeza y la miraba preocupado.
- Tengo un po.. poco de de frío.. - Dijo tiritando
- Es cierto está un poco fría esta habitación, será mejor que suba la calefacción y vaya a por mas nieve, con la nevada que está cayendo no tardaré en volver.
- Pero.. pero.. ¿Para que quieres mas mas nieve?. - Titubeó asustado
- Jessi, por fa favor. Contéstame.
- ¿Puedo pasar, Jessica?. - Dijo Doug
- ¿Que quieres?. - Abriendo la puerta
- Estaba viendo el video y como escuché que necesitabas mas nieve.. Me tome la libertad de traerte un cubo.
- Me viene que ni pintado, gracias. Ponlo ahí, y llévate el otro cubo. - Señalando el cubo vacío.
- Claro, Jessi. Y si quieres que te ayude en algo mas solo tienes que decirlo.
- De momento con esto es suficiente, gracias.
- Claro, como quieras.
- Otra cosa..
- ¿Si?. - Dijo Doug mientras la miraba nervioso metiéndose las manos en los bolsillos.
- Hazme un favor.. Apaga el video durante las próximas dos horas.
- ¿Y eso?.
- Es mejor que no veas lo que le voy ha hacer ahora, será un poco fuerte.
- Claro, Jessica. No te preocupes que no lo veré. - Dijo Doug cerrando la puerta al salir.
- Sigamos.. - Dijo mientras le miraba.
El temblaba de pies a cabeza, tiritaba y tenía los ojos llenos de lágrimas.
- ¿Se puede saber que te pasa?. Ni te he tocado..
- Es que.. que.. si le mandaste.. que que.. apagase el vídeo.. - Dijo entre hipidos.
- Nunca se.. se lo.. lo habías dicho... - Dijo sollozando.
- ¿Que? ¿Que.. que vas.. vas a.. a hacerme?.
- Vaya, eso es que ya se te pasó el efecto de los fármacos.. - Dijo mientras continuaba echándole hielo.
- Mala suerte para ti..
- Jessi, no me asustes mas, por fa.. favor.
- Bueno, ya estás lo suficiente frío..
- Ahora tranquilo y trata de no moverte demasiado. - Dijo mientras apartaba la nieve que cubría sus genitales y se quitaba los guantes.
- Noooooooooooooooooo. - Chilló aterrado al ver que cogía un bisturí.
- Jessi, por dios.. No lo hagas. Por lo que mas quieras..
- Espera a que haya muerto para hacerlo, por favor.
- Tan solo te pido eso. Mátame y luego haz conmigo lo que te plazca.
- Será mejor que ponga un poco de música.. - Dijo sonriente
- Claro, Jessi.. - Dijo mientras apretaba los puños y se ponía rígido..
- Jessi.. Ten.. tengo mu.. mucho miedo.. Por fa.. favor..
- Por favor.. vor. Solo di.. díme que vas.. vas a hacerme.. - Tartamudeó aterrado.
Ella cogió el bisturí e hizo un pequeño corte en la piel de su escroto.
- El hielo es magnifico.. apenas una gotita de sangre.. - Dijo sonriente.
El se puso blanco y ahogó un grito de terror en su garganta, mientras la miraba con los ojos desorbitados.
- Calma, esto es muy sencillo de hacer.. - Dijo mientras le mostraba el bisturí ensangrentado.
El se desmayó de la impresión.
Cuando despertó vio horrorizado sus testículos posados en un platito sobre su estómago.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh - Chilló a pleno pulmón, por encima del volumén de la música.
Levantó la cabeza todo lo que las ligaduras le permitían, y vomitó sobre la nieve que cubría casi todo su cuerpo.
- Eres un guarro. - Dijo mientras le daba una fuerte bofetada.
- Perdóname, por favor, Jessi.
- ¿Como has podido hacerme esa salvajada?. Por favor, díme que es una broma.
- Díme que no son los míos, por favor, Jessi.
- Lo siento, pero no, con determinadas cosas no suelo bromear..
- Son justo lo que parecen, tus huevos..
- Míralo por el lado bueno. Si te doy una patada ahí, ni la notarás.. - Dijo mientras se reía.
- Creo que será mejor que te quite el hielo, estás demasiado azulado.
- Mu.. muchas gra.. gracias.. - Dijo tiritando.
- Trata de no dormirte, creo que se me ha ido la mano intentando enfriarte.
- Jessi, por favor.. Deja que me vaya.
- A estas alturas, morir, me parece un hermoso sueño.
- Tan solo te pido eso, hazme lo que quieras, pero acaba de una vez, por favor. Tan solo eso. Matame ya, por favor. -Suplicó asustado.
- Vamos, no dramatices.. Todavía te queda tiempo.
- No pensarías que ya he terminado contigo, ¿verdad?.
- Ni se te ocurra dormirte.. - Dijo mientras le clavaba una y otra vez un dardo en las costillas.
- Oh, Jessi. ¿Como puedes ser tan cruel conmigo?.
- ¿Que te he hecho yo?.
- Oh, vamos. Tan solo te estoy ayudando a permanecer despierto.. Sería absurdo que pasases tus últimas horas inconsciente..
- Sería un hermoso sueño.. Has logrado lo impensable.. Has conseguido que el hecho de morirme lo vea como un precioso sueño..
- Se ve que ya no piensas con claridad.. Tanto frío te ha debido de sentar mal..
- Necesitas que te haga entrar en calor rápidamente.. - Dijo mientras encendía el hornillo.
- Jessi, por favor.. No lo hagas. Soy un estúpido.. Ni yo mismo sé lo que quiero, ni mucho menos lo que digo..
- Apaga eso, por favor, Jessi.
- No te preocupes, en un rato estarás completamente espabilado.. Estoy segura.. - Dijo riéndose.
- Los dardos estuvieron bien como pasatiempo.. Pero ya hace falta ir ultimando detalles, y pasar a cosas mas serias.
- Pero antes de que las cosas se pongan realmente dificiles para ti, he pensado que te voy ha hacer un regalo.. - Dijo mientras apagaba el hornillo
- ¿Un regalo?. - Replicó sorprendido.
- Si, eso he dicho.
- ¿Que clase de regalo podrías hacerme que..?. Perdona, no era eso lo que quería decir..
- Perdoname, por favor. ¿Puedo preguntar que vas a regalarme?.
- Claro que si, puedes preguntarme. He pensado que ya que no vas a poder comer nunca mas ninguna otra comida.. Que lo menos que puedo hacer es ofrecerte una última cena en condiciones.
- Por en condiciones, me refiero naturalmente a prepararte la cena que hubieses tomado, si la cita de ayer hubiese sido tal y como tu pensabas que sería. No voy a ir hasta la ciudad, ni mucho menos encargarla en tu restaurante favorito.. Pero te gustará, estoy segura.
- Pero si que te dejaré cenar en agradable compañía, como si fuese una velada normal. Esa será nuestra despedida..
- Aunque si lo prefieres, paso directamente al hornillo y nos saltamos la cena.. Tu decides.
- Oh, muchísimas gracias, Jessi. Significaría mucho para mí. No tanto por la comida, sino por el hecho de irme de este jodido mundo con un bello recuerdo..
- Perdona, Jessi, lo que quería decir, es que me encantará cenar contigo, y que será una hermosa despedida.
- Lo será, no me cabe la menor duda de ello.
- Y ahora, para que ni te aburras, ni mucho menos te quedes dormido..
- Mientras preparo tu cena de despedida, te voy a dejar en compañia de Doug, me consta que sabrás apreciar su visita. - Dijo riéndose.
- Jessi, por favor. Por lo que mas quieras, dejame descansar un rato.
- Está mal que yo lo diga, pero tu amigo. No se como decirlo.. Es.. Es una mala bestia.
- Por favor, Jessi, te prometo que no me dormiré. Dime que no vendrá, por favor, por favor..
- Basta.. Quiero silencio, Doug ha pagado mucho dinero para poder disfrutar de tu compañia y no seré yo quién se lo impida.. - Dijo mientras le miraba seria.
- Claro, Jessi, perdoname.. A veces se me olvida, que hace ya tiempo que dejé de tener opinión.. O bueno, mejor dicho, se me olvida que aunque siga con vida, hace ya tiempo que tanto mi vida como mis opiniones carecen no ya de valor, sino que ni siquiera merecen la pena ser escuchadas.. No soy mas que ruido de fondo..
- Mi opinión tiene aún menos importancia que la de una rafaga de viento lejana que serpentea entre las altas cumbres de las montañas, sin tener la oportunidad de mover ni una triste hoja.
- Al final todo se reduce al vil metal, está visto que lo único que tiene valor para ti en este momento es el dinero.. Siempre se acaba todo reduciendo a eso..
- Por favor, Jessi.. Dime que al menos te lo pensarás. Solo eso, por favor..
- ¿Que quieres?.
- Si te firmo un cheque que iguale el suyo o incluso que lo supere.. ¿Me permitirás descansar un par de horas. O al menos que esa mala bestia no vuelva a ponerme un dedo encima?.
- Lo siento, pero no.. Además, me colocaría en un dificil posición en el futuro, cobrar un cheque tuyo, días después de tu desaparición..
- ¿Y si hago una transferencia a la cuenta que me indiques?. No tiene porque quedar huella de lo que he hecho.. Por favor.. por favor..
- No insistas, o te quedarás sin despedida..