Jodido cabrón.
Ahora si que estoy seguro. He dado con el peor.
Si, el peor de los apostantes.
Y sin duda alguna. El mas cruel.
Maldita sea mi suerte.
- Mmmmmmmmmmmmm. - Chilló de dolor, casi al borde del desmayo.
El líquido entraba, gotita a gotita, produciéndole un dolor atroz en sus testículos.
- Tranquilo, muñequito. ¿No querrás que me enfade contigo, verdad?. - Dijo Dennis mientras jugueteaba con la ahuja que tenía clavada en su lengua.
Doug se echó a llorar mientras apretaba los puños con rabia.
Jodido bastardo..
Eres un animal sin sentimientos.
- Mmmmmmmmmm. - Chilló sin cesar.
Mientras, gota a gota, lenta pero inexorablemente el liquido atroz seguía penetrando poco a poco en sus testículos.
- Un ratito mas y estarán a mi gusto. Tan solo les hace falta un poco más de líquido. - Dijo Dennis mientras golpeaba suavemente sus huevos y se reía.
- Mmmmmmmmmmmmmm. - Chilló de dolor, mientras intentaba en vano forcejear.
- Calma. No te estreses. No quisiera tener que enseñarte otra lección. ¿Me comprendes?. - Dijo Dennis mientras ponía la mano sobre el collarín y lo apretaba aún mas.
Jodido bastardo sin sentimientos. Eres un maldito psicópata.
Por mas que lo pienso. No se me ocurre ninguna razón para pinchar mis pobres testículos y aun menos para comenzar a llenar mi pobre escroto con líquido y mas líquido.
A saber que efectos producirá, lo que quiera que sea, en mis pobres huevos.
No se lo que pretende hacerme.
Pero.. A estas alturas casi hasta le agradecería que me pegase un tiro..
Mi piel resquema y arde como si estuviese en llamas.
Y eso no es lo peor..
Ojalá solo fuese eso..
Pero no..
Es aun peor la sensación de notar como mis pobres huevos se van comprimiendo cada vez mas.
Parece que mi maldito escroto vaya a reventar.
Jamás me habían dolido tanto los huevos..
Y el líquido de los cojones sigue entrando. Cada gota parece que me quema mas que la anterior.
- Tienen un buen tamaño. ¿Nunca te han dicho que tienes los huevos como naranjas?. - Dijo Dennis entre carcajadas mientras le quitaba la ahuja de la lengua para dejarle contestarle.
- Por.. Por favor. No siga, por favor. No. - Suplicó Doug entre lágrimas.
- Te he hecho una pregunta y espero una respuesta. - Dijo Dennis mientras le daba una fuerte bofetada.
- Por favor. No mas. Por favor. - Suplicó Doug aún mas asustado.
- Contesta, gilipollas. - Dijo Dennis mientras le daba otra bofetada.
- No, señor. Nunca han mencionado que mis huevos sean como naranjas. - Replicó Doug con tristeza mientras intentaba reprimir las lágrimas.
- Eso está mucho mejor, buen chico. - Dijo Dennis sonriendo mientras le apretaba la mandíbula y le obligaba a abrir la boca.
- Tienes que estar muy orgulloso.. Tus huevos ya son casi como naranjas.. - Dijo Dennis entre risas.
- Por favor. Por favor. No siga, por favor. - Suplicó Doug aterrado.
- Y cuando termine con ellos habrán crecido bastante mas. Ya lo verás. Serán realmente preciosos.. - Dijo Dennis riéndose mientras acaricíaba sus huevos suavemente.
- ¿Que?. ¿Que pretende hacer?. ¿Que va ha hacer conmigo?. - Preguntó Doug lloroso mientras temblaba sin cesar.
- Schuss.. Basta de palabrería inútil. Me cansa escuchar tantas tonterías. - Dijo Dennis.
Doug sollozó aterrado mientras intentaba dejar de temblar.
Jessica, joder. Tienes que volver. Esto no me puede estar sucediendo a mi.
Seguro que de un momento a otro se abrirá la puerta y le dirás que su tiempo conmigo terminó.
Eso es. Tienes que venir ya..
- Abre la boca y saca tu sucia lengua fuera. - Dijo Dennis mientras apretaba su mandíbula de nuevo.
- No. Por favor. No. - Chilló Doug aterrado mientras intentaba por todos los medios no abrir la boca.
- Bien, veo que tengo un muñequito travieso. Eso me gusta. Así podré enseñarte otra valiosa lección, que estoy seguro de que sabrás apreciar. - Dijo Dennis mientras le daba una fuerte bofetada.
- Verás que fácil es, que comprendas las cosas. Ni siquiera hará falta que te lo explique dos veces. Por estúpido que seas, lo entenderás a la primera. Ya lo verás. - Dijo Dennis mientras sonreía y empujaba suavemente el lápiz situado en su uretra haciendo que penetrase aún mas hasta que un fino hilo de sangre goteaba por su glande.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhhhh. - Chilló de dolor mientras intentaba en vano moverse.
- Jodido animal. Maldito cabrón. Bastardo. Hijo de puta.. - Chilló Doug entre sollozos.
- Yo no tengo ninguna prisa. Tu verás lo que haces. - Dijo Dennis entre risas mientras seguía empujando el lápiz en su uretra.
- Ahhhhhhhhhhhhhhhhhhhh. - Chilló Doug casi sin aliento.
Mierda.. No tengo la menor alternativa. Solo me queda abrir la boca y que haga conmigo lo que quiera..
Lo que quiera. Es terrible. Solo con que haga la mitad de las salvajadas que yo he llegado a hacer. O aun peor. Las que presencié sin siquiera pestañear. Ya estoy jodido. Muy jodido..
Mierda..
Doug abrió la boca y sacó la lengua obediente mientras no dejaba de sollozar.
- Eres un muñequito deslenguado. ¿Nadie te ha enseñado nunca a ser respetuoso y educado con los demás?. - Dijo Dennis mientras atravesaba de nuevo su lengua con la ahuja dejando su lengua trabada.
- Mmmmmmmm. - Contestó Doug preocupado.
- No solo eres un deslenguado. Sino que ni siquiera te molestas en responder cuando te preguntan algo con educación. Te has ganado un premio. Y que mejor premio para ti, que un rico caramelo. - Dijo Dennis entre risas mientras le obligaba a comerse una cucharada de sal.
- Mmmmmmmmmmm. - Sollozó Doug aterrado.
¿Sal?. Joder.. ¿A que clase de jodido animal se le puede ocurrir dar a alguien una cucharada de sal?. Y mas cuando está desesperado por beber..
Por si no me bastase con la sed y las nauseas que tengo. Aun le parece poco y me hace chupar sal.
Jodido cabrón. ¿Como podría responderte si has atravesado mi lengua como si fuese un pez arponeado?. Mierda..
- Y ahora sonríe y deja ya de llorar. A nadie le gustan los muñequitos llorones. - Dijo Dennis riéndose mientras acariciaba su lengua con la punta de otra ahuja hasta hacerle herida.
- Mmmmmmmmmmmm. - Chilló Doug aterrado, mientras asentía con la cabeza e intentaba sonreír.
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